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Una forma diferente de aprender.

YOGA

El yoga es un arte antiguo que además de cultivar el cuerpo, cultiva la mente y las emociones y poco a poco nos ayuda a ser la mejor versión de nosotros mismos. Es una forma divertida de que niños y niñas desarrollen importantes habilidades en un entorno positivo, no competitivo.

Los niños a menudo sienten la presión en el colegio, tanto a nivel social como académico, además de la presión de los deportes competitivos. Esto les hace volverse autocríticos y perder la confianza en ellos mismos. La atmósfera que se crea en yoga anima a los niños a relajarse y divertirse desarrollando no solo fuerza, coordinación, flexibilidad y equilibrio, sino también conciencia corporal, mejor atención y auto confianza.

Los niños aprenden mejor cuando se divierten, así que las clases de yoga para niños mezclan historias, canciones, juegos y posturas. Mi objetivo es ayudarles a conocerse y reconocerse las partes de su ser.

BENEFICIOS:

  • Proporciona relajación y calma.
  • Fomenta el compañerismo y la calma.
  • Impulsa a sostener valores de respeto personal y hacia lo que le rodea.
  • Despierta la conciencia corporal.
OBJETIVOS DE LA CLASE:

  • Conseguir que aprendan diversas y divertidas posturas de yoga y formas de relajarse.
  • Que desarrollen a través de dichas posturas el equilibrio, la coordinación y la flexibilidad.
  • Tener un espacio de calma y relax.
¿Que opinan los más pequeños?

Me lo paso super bien jugando cada mañana.

Saray (6 años)

He aprendido a hacer cosas muy guachis en el taller de experimentos.

Pedro (9 años)

Me gusta el yoga. Mi mamá dice que es muy bueno para mi. Yo me lo paso bien, hacemos posturas y es divertido.

Joana (7 años)

En teatro hacemos cosas. Muchas cosas. Un poco locas, pero me río mucho. Es lo más divertido.

Lucas (8 años)

¿Porque Planeta Idea?

Los tres principios que configuran Planeta Idea son:

El alumnado como protagonista

Los niños, niñas y jóvenes necesitan sentirse seguros y motivados para aprender, y aprenden mejor cuanto más activamente se implican en su aprendizaje. Se les puede enseñar, sí, pero son ellos y ellas quienes tienen que aprender.. Eligen qué aprenden y qué no. Un entorno seguro y amigable, donde se sienten escuchados, respetados y tenidos en cuenta es fundamental para que quieran y puedan aprender. Son los únicos protagonistas de su aprendizaje.

Cada persona tiene su ritmo

Todos y todas somos diferentes, y cada cuál tiene unas necesidades: más tiempo, más explicaciones, más movimiento, más ejemplos, más participación, más tranquilidad… El desafío es conseguir sacar de cada persona lo mejor que tiene, ofreciéndole formas de conocer y aprovechar sus fortalezas y de empujar sus límites, para ayudarle a alcanzar sus metas. Hay muchas maneras de tener éxito en nuestros proyectos: capacidad, flexibilidad, oportunidad, visión, tesón, creatividad… pero, por encima de todo, confianza en nuestras posibilidades: cada persona es valiosa a su manera, y ese mensaje debe llegar.